El cambio de estación de invierno a primavera que ha tenido lugar el 20 de marzo conlleva una mejora de las condiciones climatológicas que facilita la práctica de deporte en exteriores. Las temperaturas cálidas de los días que discurren de marzo a junio, hacen que salir al aire libre a practicar ejercicio se convierta en una rutina saludable cada vez más apetecible. Sin embargo, este periodo del año también puede afectar a nuestro cuerpo de alguna u otra forma, lo que se hace evidente a la hora de realizar alguna actividad física en la que disminuye nuestro rendimiento deportivo. Por ello, es importante conocer cuáles son sus causas, para así abordarlas y disfrutar de la primavera de la forma más sana posible.

Por ello, hoy queremos dar a conocer los cuatro principales inconvenientes que pueden presentarse en esta época, para que puedas prevenirlos y darlo todo en tus entrenamientos y competiciones de la Copa COVAP. ¡Allá vamos!

  • Aumento de horas de luz: en la primavera se incrementan las horas de luz solar con las que cuenta el día de manera significativa. Cada vez amanece antes y anochece más tarde. Es por ello que muchos niños y niñas suelen irse a la cama a altas horas, por lo que el ciclo del sueño tiende a cambiar. Al día siguiente, el cansancio se hace evidente y el ejercicio físico no es el adecuado. En ese sentido, es conveniente intentar dormir todo lo necesario y continuar con la práctica deportiva habitual, de manera que este ciclo se regule de manera natural.
  • Polen: este es uno de los mayores enemigos de las personas con alergias. El nacimiento de las flores en esta estación hace que el polen que proviene de ellas esté presente en el aire, sobre todo en zonas abiertas como parques, escuelas y áreas deportivas. En todas las edades, pero especialmente en los menores, esto se manifiesta con conjuntivitis, dificultad para respirar, picores y posibles ataques de tos y asma. Es conveniente acudir a la consulta médica cuando se detecten para que no surjan problemas durante el ejercicio físico y este no se vea alterado.

La alergia al polen de las flores es un problema ocasional de la primavera y suele ir acompañada de problemas respiratorios.

  • Astenia primaveral: el paso a esta estación cuenta con una pequeña molestia pasajera que también afecta a niños y niñas, la astenia primaveral. Esta se debe al propio cambio de las condiciones externas a las que nuestro cuerpo se está adaptando, por lo que puede surgir una sensación de cansancio, apatía o falta de apetito. Ante ella lo mejor que pueden hacer los menores que practiquen deporte es tomar el sol, hidratarse, reducir el consumo de grasas y sobre todo, descansar. ¡Pasará en pocos días!
  • Cambio de hábitos alimenticios: con la llegada de altas temperaturas se suelen cambiar también los hábitos alimenticios, ya que apetecen más bebidas y comidas frías que ayuden a combatir el calor. Para que realices una buena sesión de ejercicio físico en primavera es recomendable el consumo de alimentos saludables de temporada, que además de estar llenos de sabor, contienen muchas vitaminas. Algunas de las frutas más populares de esta época del año son las naranjas, fresas, cerezas o ciruelas.

La fresa es una fruta típica de la primavera que ayuda a seguir una alimentación equilibrada en esta estación.

Estos son algunas de las claves para que puedas disfrutar de una primavera saludable sin bajar tu rendimiento físico. Si deseas dejarnos tu opinión o consejo al respecto, no lo dudes y hazlo a través de nuestros perfiles de Twitter, Facebook e Instagram. ¡Nos vemos en la próxima sede!