El pescado es un alimento nutricionalmente muy completo. Contiene proteínas, calcio y minerales, indispensables para el correcto crecimiento de los huesos y la formación de las células.

Los principales problemas que encuentran los niños al comer pescado son el sabor, el aspecto y las espinas. ¿Cómo podemos hacerlo divertido? Gracias a recetas que resulten atractivas a la vista, con ingredientes que hagan el plato más sabroso y escogiendo ejemplares con pocas espinas o ninguna. Algunos de los más recomendables por este último aspecto son la merluza, el mero, el lenguado, el emperador, el atún o el bonito.

Acompañar alguno de estos pescados con una deliciosa salsa y puré de patatas hará que el menú sea mucho más apetecible para los pequeños. ¡Deja que elijan su favorita!

Otra forma de conseguir que coman este grupo de alimentos es “ocultando” su aspecto en forma de palitos, empanadillas o volovanes. ¿Y a quién no le gusta una hamburguesa? En lugar de prepararla con carne, elabora hamburguesas de pescado blanco. Eso sí, con cuidado de retirar todas las espinas.

El problema de alternativas como los palitos de merluza es la grasa de la fritura, por eso, te proponemos cocinarlos al horno. ¡Te contamos cómo hacerlo!

Ingredientes:

–          500 gr de merluza

–          Huevo

–          Harina

–          Pan rallado

–          Aceite

–          Sal, pimienta y pimentón

Preparación:

Corta el pescado en tiras para hacer la forma de los palitos de merluza.

Prepara un plato con huevo batido mezclado con la sal, la pimienta y el pimentón, otro con harina y otro con pan rallado. Y pasa las tiras por cada uno de los platos, en ese orden.

Precalienta el horno a 200º. Después, coloca los palitos en la bandeja sobre papel de hornear a una altura media durante unos 20-25 minutos. Para obtener un dorado homogéneo, dales la vuelta cuando haya transcurrido la mitad del tiempo.

¡Y a comer!